Sin duda alguna el 11 de septiembre de 2001 se ha convertido en una fecha inolvidable para todos los que pudimos presenciar de una u otra manera lo que pasó ese día, la terrible catástrofe.
Yo tenía aproximadamente siete años, y no contaba con ningún familiar o conocido que viviera en estados unidos. Aún así me entere de todo lo sucedido. Fue tema de que hablar durante mucho tiempo, y en todos los lugares.
Fue algo de interés mundial, todas las personas sabían algo al respecto.
Sin embargo hubiera sido mucho más fácil y se hubiera dado una mejor cobertura si en ese entonces se hubiera podido contar con el alcance de las redes sociales con las que contamos hoy en día.
Estaríamos equivocados si mencionamos que solo los jóvenes pasamos online todo el día, ya que ahora vemos desde niños de 7 años hasta adultos de más de 40 con cuentas en internet. El alcance de las redes sociales ha incrementado de una manera sorprendente en los últimos años; no solo en cuanto a generaciones sino también a nivel internacional.
¿Se imaginan la gran cobertura que hubiera tenido el suceso a nivel mundial?
En ese entonces hubieramos estado twiteando, dando RT, subiendo imágenes, compartiendo imágenes en facebook, leyendo estados, etc. Un sin fin de cosas hubieran llegado a los teléfonos de todos. Todos los sentimientos se podrían haber transmitido de una manera más directa y a millones de personas sobre la faz del planeta. Podríamos tener alcance de cosas inimaginables. Habríamos leído estados de las personas dentro de las torres; sus últimas palabras, twits de despedida. Videos en youtube de las víctimas despidiendose o incluso del impacto de los aviones.
¿Y todo esto para qué? Para poder analizar con más detenimiento el atentado, para poder informar con una cobertura aún mayor, etc. La transmisión y el esparcimiento de todo esto hubiera sido de una escala aún mayor.
Del otro lado de la moneda, también habrían aparecido datos falsos, porque nunca falta quién se aprovecha del dolor ajeno.
Por esto es importante recalcar y recordar el gran poder que tienen las redes sociales. Y recordar que si bien muchos las utilizan para expresarse, incluso para expresarnos debemos saber como.
Yo tenía aproximadamente siete años, y no contaba con ningún familiar o conocido que viviera en estados unidos. Aún así me entere de todo lo sucedido. Fue tema de que hablar durante mucho tiempo, y en todos los lugares.
Fue algo de interés mundial, todas las personas sabían algo al respecto.
Sin embargo hubiera sido mucho más fácil y se hubiera dado una mejor cobertura si en ese entonces se hubiera podido contar con el alcance de las redes sociales con las que contamos hoy en día.
Estaríamos equivocados si mencionamos que solo los jóvenes pasamos online todo el día, ya que ahora vemos desde niños de 7 años hasta adultos de más de 40 con cuentas en internet. El alcance de las redes sociales ha incrementado de una manera sorprendente en los últimos años; no solo en cuanto a generaciones sino también a nivel internacional.
En ese entonces hubieramos estado twiteando, dando RT, subiendo imágenes, compartiendo imágenes en facebook, leyendo estados, etc. Un sin fin de cosas hubieran llegado a los teléfonos de todos. Todos los sentimientos se podrían haber transmitido de una manera más directa y a millones de personas sobre la faz del planeta. Podríamos tener alcance de cosas inimaginables. Habríamos leído estados de las personas dentro de las torres; sus últimas palabras, twits de despedida. Videos en youtube de las víctimas despidiendose o incluso del impacto de los aviones.
¿Y todo esto para qué? Para poder analizar con más detenimiento el atentado, para poder informar con una cobertura aún mayor, etc. La transmisión y el esparcimiento de todo esto hubiera sido de una escala aún mayor.
Del otro lado de la moneda, también habrían aparecido datos falsos, porque nunca falta quién se aprovecha del dolor ajeno.
Por esto es importante recalcar y recordar el gran poder que tienen las redes sociales. Y recordar que si bien muchos las utilizan para expresarse, incluso para expresarnos debemos saber como.
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